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LA "CRISIS" SE CEBA EN EL TÉJIDO EMPRESARIAL ASTURIANO



Ya llevamos más de un año de desgobierno en Asturias, dentro del segundo mandato de "Tinin Areces el Grande" y creo que es el momento de que todos recordéis el discurso que empleo en la sesión de investidura de este personaje:
http://www.elcomerciodigital.com/20070705/politica/texto-integro-discurso-vicente_200707051315.html
La razón por la que os pido que volváis a leer esto es muy sencilla, en este discurso nos pretende vender que la crisis ha terminado, pero como siempre las cifras le desacreditan constantemente. Aunque ahora tiene una nueva escusa a su falta de previsión "desaceleración", "crisis" o como prefiera denominarla.
En los últimos días se han hecho públicos los resultados del "Estudio Radar" que elabora la consultora Axesor, en ellos Asturias se ha situado entre las comunidades autónomas donde más ha aumentado la disolución de sociedades mercantiles, la extinción de empresas ha aumentado en Asturias el 39,6 por ciento en el primer semestre de 2008, proporción sólo inferior a las de Murcia y Navarra y muy superior al promedio del país (22,8%). A esto debemos de unirle que la constitución de sociedades también sufrió un importante parón reduciéndose en un 19% con relación al año 2007, por debajo del promedio del país que se sitúa en el 24%.
El incremento en las disoluciones empresariales y el descenso en la constitución de otras nuevas tienen tintes preocupantes en Asturias, una de región caracterizada históricamente por la falta de iniciativa empresarial privada, amparado en sus tiempos por la fuerte presencia de grandes empresas públicas, que pertrechaban la economía regional.
Sin embargo después de las duras reconversiones de los años 90, que desmantelaron el tejido industrial asturianos las S.A y las S.L, deberían haber recogido el testigo de motor económico de la región. Polígonos industriales, ayudas estatales y ayudas europeas estaban dirigidas para ese desarrollo, pero nadie sabe a ciencia cierta en que se emplearon. O mejor dicho si se sabe todas esas ayudas se metieron dentro de un cajón desastre que se constituyó en la financiación de una región.
Un ejemplo de esto son los famosos fondos mineros aprobados el 15 de Julio de 1997 que contemplaban actuaciones de reactivación económincas que se pueden resumir en tres grandes grupos.
El primero relativo a la ejecución de infraestructuras con una dotación para el conjunto de actuaciones a desarrollar en todas las regiones carboníferas de España y en los ocho años de duración del plan, de 400.000 millones de pesetas, que serían aportados a razón de 50.000 millones de pesetas cada uno.
El segundo contemplaba acciones de formación con una dotación en las mismas condiciones de aplicación que la anterior, de 40.000 millones de pesetas dividido en aportaciones anuales de 5.000 millones de pesetas.
Y finalmente el tercer gran bloque contemplaba actuaciones tendentes a la reindustrialización y diversificación como vías de recuperación económica para las comarcas mineras, con una dotación en las mismas condiciones que en los anteriores de 80.000 millones de pesetas dividido en aportaciones anuales de 10.000 millones de pesetas.
Creo que las cifras hablan por si solas "80.000 millones de pesetas", para la creación de empleo y reindustrialización. O lo que es lo mismo creación de empresas que ocupen el lugar dejado por las estatales, en que se emplearon estos presupuestos. ¿En ávales a Naval Gijón?, sin solicitar la transparencia de la Gestión de la Gestora del Astilleo. ¿En subvenciones a Asturtex?, para que se marche y deje en la calle a 200 trabajadoras. O quzás en ¿proyectos de gasificadoras, embalses y Térmicas?, esperando que Asturias viva de vender energía.
Por qué en impulsar la iniciativa empresarial no se gastó, el ejemplo lo tenemos en Avílés donde la práctica totalidad del Polígono Industrial está ocupada por empresas que ya tenían presencia en la región. Todavía esperamos los 500 puestos de trabajo de Isolux, la centena del Centro de Desarrollo de Microsoft, el centenar de empleos del Grupo Tyssen o los cerca de 500 que debía generar la empresa Dupont. A eso debemos de unir las empresas de innovación prometidas ya en la anterior legislatura. Pero la realidad es otra Asturias sigue viviendo por el impuso de empresas que llevan más de 50 años en la región y hasta ahora por el crecimiento incontrolado de la construcción (que ahora parece que se frena). En lo que se refiere a iniciativas privadas los datos hablan por si mismo, la iniciativa empresarial es prácticamente inexistente y gran parte de la culpa de esto la tiene un gobierno que nunca entendió el significado del término "reindustrialización" y que parece que no pasean por las calles en las que cada vez proliferan más los cárteles de "SE TRASPASA".

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